¡Un buen y feliz año nuevo!
¡Nuestros mejores deseos en este Año Nuevo de parte de todos nosotros en ActiveChristianity!
Entremos en este año nuevo con la cabeza en alto y una fe viva en toda la palabra de Dios. Todo lo que está escrito allí es para hacernos felices y darnos riquezas eternas. No nos quedemos sentados esperando a que llegue la guerra, el Anticristo y toda la miseria que está por venir. La gente estará ansiosa en su desesperación por todo el mal que vendrá sobre la tierra, todo lo cual es fruto de todos los pecados y el orgullo. Pero nosotros esperemos a Cristo y al eterno verano con la cabeza levantada. (Lucas 21:28-30).
Si vivimos por la fe en Dios y sembramos las cosas buenas que Dios nos da la gracia de decir y hacer, también segaremos cosas buenas llenas de paz y bendición según las leyes de Dios. Cuando Jesús envió a sus discípulos con el glorioso evangelio, les dijo que a Él se la había dado toda potestad tanto en el cielo como en la tierra, y prometió que estaría con ellos todos los días hasta el fin del mundo. Nosotros también tenemos que aferrarnos a esta promesa y regocijarnos en ella. Esto aplica a los discípulos de Jesús que guardan Su palabra y enseñan a otros a hacer lo mismo. Si nosotros somos uno de sus discípulos, entonces también somos un pueblo adquirido por Dios y las personas más preciosas para Él en esta tierra. En Romanos 8:31 dice: “Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” y continúa en el versículo 21, “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?” Sí, Él nos ama tanto que no puede hacer otra cosa más que eso.
No entendemos todas las cosas por las que pasamos en esta vida, pero debemos entender y regocijarnos por el hecho de que nosotros que amamos a Dios todas las cosas nos ayudan a bien (Romanos 8:28), y que Dios es fiel y no nos dejará ser tentados más de lo que podamos resistir. (1 Corintios 10:13) Algo que también tenemos por seguro es que todo lo que pasa en nuestro camino es la sabiduría oculta de Dios, la cual ha predestinado antes de los siglos para nuestra gloria. (1 Corintios 2:7).
Si seguimos a Cristo, se nos garantiza una paz interior y un gozo que no puede ser afectado por nada ni nadie. “El reino que Dios nos da, no puede ser movido. Demos gracias por esto, y adoremos a Dios con la devoción y reverencia que le agradan.” Hebreos 12:28. Al empezar, este reino es tan pequeño como un grano de mostaza, pero nace en nosotros por Dios mismo y por medio de Su palabra de verdad. Dentro de este reino existen todas las posibilidades para desarrollarse y crecer en el poder y la gracia de Dios; este reino consiste en justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. (Romanos 14:17).
“La paz os dejo, mi paz os doy” Jesús dice en Juan 14:27. Y Pablo escribe en 2 Tesalonicenses 3:16: “Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor sea con todos vosotros.”
Para todos los que temen a Dios, las Escrituras están llenas de esperanza y consuelo, tanto para el tiempo que pasamos aquí en la tierra, como para toda la eternidad. En los tiempos venideros, Él mostrará las abundantes riquezas de Su gracia con nosotros en Cristo Jesús. (Efesios 2:7).
Como personas normales no somos capaces de entender el significado del tiempo en el que vivimos. Pablo oró por la iglesia en Éfeso para que Dios alumbrara los ojos de su entendimiento; para que supieran cuál es la esperanza a que Él los había llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza. (Efesios 1-18-19). Si nosotros tenemos alumbrados los ojos de nuestro entendimiento para ver y entender nuestro gran, eterno y glorioso llamado, entonces es imposible que nos afanemos o estemos desanimados. Somos como la novia en Proverbios 31:25: “Fuerza y honor son su vestidura; y se ríe de lo por venir.”
“Pero no es tan fácil estar continuamente regocijándose”, dices. Sí, pero si hay algo que es completamente seguro, es que no va ser más fácil si no te alegras. El gozo del Señor es nuestra fuerza. Debemos tenerla como fundamento en nuestros corazones a través de una esperanza viva y una fe viva a través de todas las tribulaciones y adversidades de todo tipo. Si tenemos lo invisible ante nuestros ojos, entonces nuestras tribulaciones se vuelven cortas y momentáneas, obrando en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria. ¡Así será si tienes una fe viva!
En los últimos días, la injusticia se impondrá y el amor de muchos se enfriará. Pero no estaremos entre los muchos, sino entre los pocos en los que el amor no puede ser apagado. La luz eterna se ha encendido en nuestros corazones y nunca se apagará, sino que seguirá brillando en las moradas celestiales. Aunque la oscuridad y la maldad aumenten como nunca antes a nuestro alrededor, vemos que las cinco vírgenes prudentes estaban de pie con lámparas encendidas en la oscuridad de la noche.
“Considera al íntegro, y mira al justo; porque hay un final dichoso para el hombre de paz.” Salmos 37:37. “Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos.” Isaías 3:10. ¡Si así es con nosotros, entonces entraremos en un buen y nuevo año, donde solo irá mejor y mejor, y será cada vez menos pesado hasta llegar el día en el que estemos de pie con Dios en el Monte Sion!
Escritura tomada de la Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.