La quinta promesa gloriosa: Vestiduras blancas y el libro de la vida
El quinto artículo de una serie sobre nuestras recompensas eternas.
«El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.» (Apocalipsis 3,5)
Dios ama su creación. El pecado la destruyó, pero ahora Dios tiene un plan para volverla a su estado original de perfección, y recompensará a los que le ayuden a llevar a cabo este plan.
El pecado nació por causa del deseo de Satanás de establecerse sobre Dios, y esto destruyó la armonía en el cielo. Ahora Dios erradicará todo el pecado de su creación, de tal forma que no haya posibilidad de que esto ocurra de nuevo.
Dios creó a los seres humanos con el propósito de que gobernaran sobre el pecado. (Génesis 4,7) Todo su plan es que la humanidad viva una vida en la que odien y resistan el pecado, y digan sí a Dios – tengan victoria. El que vence el pecado en su propia vida demuestra que el camino de Dios es perfecto, y es parte de la obra para erradicar el pecado por la eternidad. Todos los que hagan esto degustarán las ricas recompensas de vivir una vida así. Estas promesas son para todos los que vencen.
Vestiduras blancas
Sólo para ti que has vencido el pecado, la esposa de Cristo, es apropiado que te pongas vestiduras blancas que son sin «mancha ni arruga ni cosa semejante, sino… santa y sin mancha.» (Efesios 5,27) Porque te has mantenido puro del pecado, las vestiduras blancas darán testimonio acerca de tu pureza por la eternidad.
Porque te has mantenido puro del pecado, las vestiduras blancas darán testimonio acerca de tu pureza por la eternidad.
Por causa de tu obediencia, fidelidad y paciencia en ser un vencedor, tienes derecho a caminar junto a Jesús en vestiduras blancas.
«Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos» (Apocalipsis 19,8)
El libro de la vida
Inicialmente el nombre de todos está escrito en el libro de la vida. Cada persona que nace está destinada a la vida eterna. El pecado es lo que causa que el nombre de uno sea borrado. (Éxodo 32, 32-33) Si quieres permanecer inscrito en el libro de la vida entonces tienes que vencer el pecado. Jesús dice: «Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás.» (Juan 10, 27-28) El camino para vencer el pecado ha sido claramente establecido por nuestro precursor y pastor. Sólo tienes que estar dispuesto a seguirlo en este camino.
El camino para vencer el pecado ha sido claramente establecido por nuestro precursor y pastor. Sólo tienes que estar dispuesto a seguirlo en este camino.
¿Crees en él y en lo que logró mientras estuvo en la tierra como un hombre? ¿Eres fiel para estar en las batallas de la vida, así como Él lo hizo? Entonces tu nombre no será borrado del libro. Entonces Jesús confesará tu nombre ante su Padre y ante sus ángeles. Confesará que eres digno para estar con Él por toda la eternidad.
Escritura tomada de la Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.