¿Es la fe más fuerte que un bombardeo?
La fe de Matt fue puesta a prueba en una de las zonas más peligrosas del mundo.
En 1 Pedro 1:7, Pablo escribe sobre una fe probada, que es mucho más preciosa que el oro. Pero también escribe que se prueba con fuego. Nuestra fe es probada a través de muchas situaciones en la vida, tanto grandes como pequeñas, algo que Matt, un teniente de 25 años (ahora capitán) en el ejército de Estados Unidos, experimentó personalmente.
Aunque a primera vista uno no habría adivinado todo lo que ha pasado, Matt ha vuelto recientemente a casa de su servicio en Afganistán. Durante este tiempo estuvo lejos de sus dos niñas hermosas y querida esposa, sus amigos y el resto de su familia. Cuando le pregunto sobre esto, me doy cuenta que está animado y abierto; con ganas de hablar de la obra que Dios ha hecho en su vida y profundamente agradecido por las situaciones que Dios ha usado para probar su fe.
Un mal comienzo
Desde el principio Matt enfrentó temor y ansiedad por ser trasladado, "Estuve un poco deprimido cuando primero me trasladaron, porque estaría lejos de mis amigos y familia por un año, en uno de los lugares más peligrosos del mundo en ese momento", explica. "Y también en la zona más peligrosa de Afganistán."
Lo que me cuenta me va dando la impresión que lo que experimentó fue todo menos positivo: "Las misiones nunca resultaban como lo planeado", recuerda. "Uno nunca estaba a salvo. Todo el tiempo donde estaba desplegado existía la posibilidad de ataques con cohetes y bombardeos. Incluso dentro de la base, uno seguía en peligro."
Pero Matt explica cómo el peligro que enfrentó a diario le dio nuevas oportunidades para acercarse a Dios y hacer uso de Su la Palabra. "Me aferré firme a mi fe, y cada día trabajaba con algo nuevo que Dios me hablaba o que había leído en las Escrituras", explica. "El versículo en Hebreos 13:5 me recordaba que Dios ha dicho, “No te desampararé, ni te dejaré.” Podía utilizar tales palabras que fortalecen la fe para tener reposo cuando era tentado a preocuparme por mi seguridad o bien a enojarme cuando mis hombres desobedecían mis órdenes – cosas como esas."
Una prueba de fe especialmente difícil enfrentó Matt cuando su amigo más cercano en el ejército fue asesinado. "Fue muy difícil para mí entender que era la voluntad de Dios y que era su hora de irse", dice Matt. "Mi fe realmente fue probada. Pero me di cuenta que independiente del tipo de pruebas que enfrente, nunca es tan malo que personalmente no pueda vencer con la ayuda de Dios. Sin importar de lo que suceda con mis amigos, mi familia o yo. Y esto necesitaba recordar, independiente de lo difícil que fuera la situación."
Dios veló sobre mí
La fe de Matt se fortaleció cuando experimentó que Dios lo mantuvo a salvo en situaciones muy peligrosas. Me cuenta de una oportunidad que estaba de guardia, y el convoy justo detrás del suyo fue volado por una mina terrestre. "Había cruzado exactamente por el mismo camino – cruzado las mismas minas – y no explotaron. Mis hombres y yo estuvimos muy agradecidos por eso, y supe que Dios velaba sobre mí."
A través de todas estas circunstancias Matt experimentó que Dios podía darle reposo de los pensamientos de ansiedad. "Al final iba a patrullar y me sentía completamente seguro – fui lleno de paz cuando me di cuenta que todas las cosas me ayudan a bien, como está escrito en Romanos 8:28. Todo lo que sucedió fue lo que Dios permitió que sucediera. Quizás jamás podría volver a casa, pero si ese fuera el caso, sería la voluntad de Dios. Si permanecía fiel a Dios, entonces podría ver a mi familia de nuevo, si no en la tierra, en la eternidad.
"Suena raro decir que no tenía miedo a morir", admite, "pero realmente creer que Dios tiene un plan perfecto para mí, disipó todo mi miedo."
Aunque sus experiencias pueden ser fuera de lo común para la mayoría de nosotros, Matt experimentó que preservar la fe en Dios es la clave para vencer en cualquier circunstancia. "Para mí fue en Afganistán, pero uno puede encontrarse en una situación completamente diferente pero igual de difícil. Puede parecer tenebroso a veces, ¡pero siempre hay esperanza a través del evangelio!" Dice con entusiasmo.
Matt ha experimentado 1 Pedro 1:7 como una realidad en su vida, y tiene una esperanza viva sobre el resultado de la segunda mitad del versículo: "… sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego – sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo."
"Que la prueba de tu fe, sea mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, y que sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo."
Escritura tomada de la Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.