10 citas para la vida diaria por Esther Smith

Esther Smith fue una mujer temerosa de Dios que amó a Jesús con todo su corazón.  Ella fue una columna en Brunstad la Iglesia Cristiana y tuvo mucha sabiduría y poder espiritual.

Este poder no vino sobre ella como un don especial que Dios le había dado. No, ella fue una «mujer real» que amó tanto a Jesús que no quiso otra cosa  sino seguir sus pisadas en su vida diaria.  Ella uso sus pequeñas circunstancias en la vida diaria para llevar a cabo esto, y ser libre del pecado. Por esto se convirtió en un ejemplo y una bendición para muchas personas.

Estas citas de Esther Smith pueden ser una ayuda para todos aquellos que desean una tal vida. Sea que te encuentras sentado en un escritorio todo el día,  o eres una madre con sus hijos en el hogar, o lo que sea, es posible llegar a ser como Jesús.

Busca a Dios en la oración

La oración es un estado en el que constantemente debemos mantenernos, no sólo algo que hacemos por unos minutos de vez en cuando – algo que uno menciona en ciertas ocasiones cuando se encuentra en extrema necesidad. Es muy importante que Dios nos pueda hablar siempre. Esto hace mucho más fácil buscar el reino de los cielos en todo momento.

Por nada estéis afanosos

Está escrito «por nada estéis afanosos», ¡y esto es un mandamiento! ¡Yo empecé una batalla en esta área, luché contra esto y conseguí dejar de ser ansiosa! Uno puede afligirse por mucho tiempo y fastidiarse a sí mismo y a los demás. Es mucho mejor pelear contra esto tan pronto se presenta.

Oren por amor

Debemos permanecer y desarrollarnos en el  amor, y éste debe ser la fuerza impulsora en nuestra vida. Es posible amar a todas las personas. Cuando sientas la falta de amor, simplemente ora.

La gravedad de la envidia

La envidia hace a la gente solitaria, y trae mucho sufrimiento a sus vidas. La envidia es una cosa horrible en la carne del hombre. Es un pecado que necesitamos tomarlo con seriedad mortal.

Una relación con Jesús

Es muy importante buscar una relación con Jesús. Piensa que Él pudo dejar el cielo donde lo tenía muy bien, porque nos vio sufriendo y luchando con nuestra carne, ¡y voluntariamente tomó estos padecimientos sobre sí mismo para abrirnos un camino! También tenemos que padecer, pero no es tan difícil padecer cuando amamos.

Oren por sabiduría

No es tan difícil reconocer que tengo falta de sabiduría. Cuando oramos y buscamos la sabiduría de Dios con un anhelo de una profunda plenitud de la vida de Cristo, entonces siempre encontramos algo a que extendernos.

Satisfecho con la forma cómo Dios hace las cosas

Es bueno orar para ser semejantes a Dios en todo aspecto, y así poder recibir gracia para tomar las cosas de forma divina. Entonces debo estar satisfecho con la forma cómo Dios hace las cosas para mí en la vida. Si uno está satisfecho, entonces está satisfecho, ya sea si estoy sano, libre y activo o bien limitado de alguna manera.

La crianza de los hijos

Se requiere amor y dominio propio para criar a los hijos, y por eso los padres necesitan orar fervientemente a Dios por su propia salvación, de modo que el propio pecado no aparezca e interfiera en la crianza de los hijos. ¡Piensa que podemos ser salvos de la ira e irritación! Los niños notan rápidamente cuando sus padres están irritados, y por lo tanto también tienden a oponerse.

Acusación

Toda acusación es del diablo, sin importar de dónde proceda. Acusar a los demás es tan peligroso como darle rienda suelta al acusador en tu propia vida. El acusador no brinda esperanza. Dios no viene con acusaciones, sino con amonestaciones que dan luz y esperanza.

Sé pobre en ti mismo

Es esencial que te des cuenta que no eres nada en ti mismo. Si uno se siente rico y satisfecho en sí mismo, entonces no puedo recibir nada de Dios. Es un horrible espíritu de encontrar en una persona, un espíritu que impide completamente todo crecimiento y desarrollo espiritual.

Citas tomadas del libro «Esther Smith – una vida en comunión con Jesús y los santos.»
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